Un equipo del CSIC diseña un mecanismo que permite limpiar los terrenos sin necesidad de usar sustancias químicas de ninguna clase. El prototipo consistirá en un vehículo, o robot autónomo, con un sistema de visión con inteligencia artificial que discriminará las malas hierbas de los cultivos. Luego detectará los meristemos de las malas hierbas (responsables de su crecimiento) y les aplicará un láser de alta potencia para matar las plantas.
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